Pues bien, ya inicio 2011, un año nuevo en donde mucha gente pone esperanzas, anhelos, deseos y propósitos; un tiempo de oportunidad para proponerse cambios personales, y que si se aplica uno, pues seguramente los alcanzara.
Seguramente por este espíritu, por esta energía colectiva de la sociedad, tenia la impresión que encontraríamos otro país, que 2011 nos ofrecería, así como nuestros propósitos personales, un México diferente. Pero o sorpresa, las noticias son las mismas, muertos por aquí, muertos por allá, alzas económicas que afecta a los más vulnerables y no a los más ricos, políticos mintiendo, diputados que no asisten a su curul, autoridades ciegas y absurdas … en fin, el escenario no ha cambiado, sigue igual, no paso nada, solo cambiamos de año.
Y para acabarla, en esta realidad, México ha sido considerado entre los 6 países más violentos, comparado con aquellos que se encuentran en guerra; seguimos sin reconocer, que si estamos en guerra, la negación es el primer obstáculo para lograr los cambios, según dicen los psicólogos.
Que nos comparen con países como Afganistán, o Pakistán entre otros, por su índice de violencia en la categoría de crisis severa o guerra, debería preocupar a las autoridades, pero además compararnos con estos países, en donde el cumplimiento de los derechos humanos es prácticamente nulo, eso, eso debe ser del interés de todos los ciudadanos.
Por otra parte, estas noticias además de ubicarnos en la situación que vivimos en la comparación mundial, pues no son noticias favorables tampoco, para aquellas ciudades o sitios turísticos, en donde seguramente la dinámica de turistas tendera a disminuir, y con ello a generar impactos sociales y económicos que afectan a todos estos mexicanos que viven de ello.
La inseguridad y el incumplimiento de la ley en la protección de ciudadanos, cada vez es más evidente y mas vergonzoso, así lo marcan organizaciones internacionales ante el caso de Marisela Escobedo y su hija, ante los secuestros de migrantes latinoamericanos por México, ante la violencia contra las mujeres, por mencionar algunos ejemplos.
Estamos como país, en la mira internacional, como un país no confiable, como un país inseguro, como un país carente de valores ciudadanos, ante tanto hecho de impunidad, que pone también en evidencia, el miedo o la pasividad de la sociedad mexicana para exigir un país más sano, y en estado de derecho.
Ante este escenario, espero que los propósitos personas se cumplan y sobre todo espero, que entre esos propósitos se encuentren participar, pedir cambios en nuestro sistema de gobierno, cada ciudadano sumándose con una actitud y a un esfuerzo colectivo, puede generar los cambios que tanto le hacen falta a nuestros país, a nuestras familias, a nuestros hijos.
